La reforma a la distribución eléctrica

La Ley de distribución y el perfeccionamiento en la transmisión son los dos desafíos que enfrentará el director ejecutivo de Empresas Eléctricas, Rodrigo Castillo, en 2019. Pero, le pone énfasis a la de distribución -que ingresará en el segundo semestre al Congreso-, ya que el sistema cambió y hay que adaptarse, indicó Castillo.

¿Cuál es la importancia de la ley que viene en distribución?

-La reforma a la distribución eléctrica en Chile va a ser la reforma económica más relevante desde el multicarrier. A ese nivel lo pongo. Hoy existen tecnologías, información y experiencia que nos hacen saber a ciencia cierta que el sistema de distribución eléctrica en Chile debe cambiar.

Si se le suma que ni las tecnologías ni las regulaciones, ni los paper, ni la academia, son importantes en sí mismas y en forma abstracta, y todos ellos son importantes en cuanto permiten generar ventajas para los clientes.

¿Cuál va a ser el desafío?

-Hoy estamos frente a un doble desafío: por una parte, una mejora sustantiva de la calidad del servicio para los clientes y también tenemos la enorme oportunidad de vivir este proceso de transición energética en beneficio de los clientes, a través de nuevas tecnologías que nos permitan hacerlo de manera más eficiente y con más participación del cliente final en la toma de decisiones.

Esto debe ir en línea con una regulación que sea flexible, que permita adaptarse a los cambios, a la incertidumbre tecnológica y que permita que la calidad del servicio se logre a través de metodologías técnicas que pueden llegar a ser mucho más eficientes e innovadoras.

¿Cuál es el principal foco para las empresas?

-Desde el punto de vista de las empresas distribuidoras, es la calidad de servicio. Hoy es posible llegar a niveles de calidad de servicio comparables con tecnologías diferentes.

¿Chile está atrasado?

-Dentro de la región está adelantado. Probablemente en modernización de redes, Chile está entre los primeros. Pero cuando nos comparamos con países Ocde estamos mucho más atrás.

¿Cuál será el foco en transmisión?

-El gobierno anunció una ley para hacer algunas mejoras, pero todavía no tenemos claro exactamente cuáles van a ser esas mejoras. Pero si tuviera que dar un concepto, probablemente tenga que ver con una transmisión más flexible, con toma de decisiones más flexible, más ejecutivas, que permitan que esta gran reforma que nosotros apoyamos pueda superar algunas trabas burocráticas que quedaron en la ley antigua.

¿Incluirá que las transmisoras puedas invertir en los otros segmentos?

-Tenemos la expectativa de que eso ocurra. Nos gustaría mucho que esta nueva ley de transmisión se hiciera cargo de un paralelismo que nos parece que es inadecuado.

Cardones-Polpaico lleva más de un año de atraso. ¿Qué tan factible es hacer proyectos de esa magnitud?

-Es factible. De hecho, esta propia línea que efectivamente está atrasada, es una demostración de que se puede. Aun con la demora, la línea va a existir, va a estar en funcionamiento.

Los retrasos de cualquier línea de esta importancia son de mucha preocupación para el sistema, y en el futuro deberíamos hacernos cargo de aquellos factores que influyeron en este retraso, a efecto de que en el futuro se puedan predecir e intentar que no vuelvan a ocurrir.

Fuente/ Pulso
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